En algunas ocasiones, atravesar un proceso judicial se vuelve necesario o la ley directamente nos lo impone como un requisito legal. En esos casos que se extienden en el tiempo intervienen organismos y terceros que no conocemos; por eso, tener un acompañamiento profesional que nos informe, nos contenga y guíe es esencial.
Este servicio incluye una reunión inicial, el armado de un plan de acción, la gestión en conjunto de toda la documentación que resulte necesaria y la representación legal en el trámite hasta su finalización.
Desde mi visión profesional y personal, no puedo dejar de lado que no es lo mismo sufrir un accidente de tránsito de forma imprevista que afrontar un divorcio -los cuales, además, tienen todas las particularidades de un contexto familiar- ni tampoco estar en la necesidad económica de iniciar una sucesión para, por ejemplo, poner en venta una propiedad.
Por ello, podemos acordar las formas de trabajo, contratación y pago de acuerdo a las posibilidades y necesidades de cada cliente, respetando las pautas reguladas por las leyes que rigen la actividad de los abogados.
Si necesitás acompañamiento en alguno de estos trámites no dudes en escribirme para que podamos conversar.